El 28 de noviembre de 2008 el Correo de Lectores del diario Clarín publicó la aclaración, en relación de Alicia Bernasconi, secretaria general del CEMLA, al artículo del 16/11.
Escribo por la nota sobre los archivos de entrada de pasajeros, publicada en Clarín, el domingo 16, y al trabajo del Centro de Estudios Migratorios Latinoameriacnos, CEMLA.
Nunca se insistirá bastante sobre la importancia de cuidar y valorar el patrimonio de la memoria colectiva. Pero francamente me dolió que lo que dije de positivo, sobre las mejoras de los últimos años, fue omitido completamente, lo que es injusto con las personas que se preocupan por preservar los testimonios que otros han abandonado durante décadas, y con quienes nos apoyan en nuestra tarea.
Los que trabajamos en el CEMLA valoramos la diferencia entre haber llevado adelante la base de datos, durante veinte años, sin apoyo económico sostenido, y contar, desde hace aproximadamente tres años, con el apoyo de la Dirección de Migraciones, que asignó tres personas para realizar las tareas de carga de datos bajo mi dirección, lo que nos permite darle continuidad a la tarea y asegurar la calidad del trabajo.
Otro paso en la dirección correcta fue el envío de los libros de listas de pasajeros correspondientes al período 1882-1937 y los legajos conocidos como "partes consulares" al Archivo General de la Nación, en 2007.
Por supuesto que no puedo desmentir que hayan robado o destruido hojas de los libros. Como no puedo desmentir que alguien le haya vendido un buzón a otro entre 1916 y 1940.
Alicia Bernasconi abernasconi@cemla.com
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